152 (VII 455)
Yace aquí la vieja esponja de tinajas,
la beoda Marónide, sobre cuya tumba
hay una copa ática bien visible a todos.
Bajo tierra gime, mas no por los hijos
ni el esposo a quien dejó en la indigencia,
mas sólo porque esta copa está vacía.
Epitafio de Marónide, una vieja borracha que ha disipado el patrimonio familiar en la bebida y que ostenta en su sepulcro como emblema una copa ática, cosa por lo demás frecuente en las tumbas. Su nombre recuerda al de Marón, que dio a Odiseo el licor que había de embriagar al Cíclope.
LEÓNIDAS
154 (VII 163)
-¿Quién eres, mujer que aquí yaces, y quién fue tu padre?
-Praxo, hija de Calíteles. -¿De qué patria? -Samia.
-¿Quién te enterró? -Fue Teócrito, el cual recibióme
de mis padres. -¿De qué moriste? -Estando encinta.
-¿Cuántos años llegaste a cumplir? -Veintidós. -¿Y quedaste
sin hijos? -A Calíteles dejé con tres años.
-Pues que al menos él viva y que llegue a vejez avanzada.
-Y que todo lo bueno te dé a ti Fortuna.
Diálogo de la muerta (según el verso primero, sepultada bajo una columna paria, esto es, de mármol de aquella isla del Egeo, que era famoso...) con un viajero. Ha sucumbido al dar a luz a su tercer hijo; el segundo, superviviente, se llama como el abuelo materno; es de suponer que antes había muerto otro denominado como el paterno.
LEÓNIDAS
184 (VII 316)
No me saludes ni inquieras quién soy ni de quiénes
procedo, mas pasa de largo por mi estela
o, si no, a tu destino ojalá que no llegues; e incluso
si guardas silencio, que no llegues tampoco.
La adscripción es dudosa: ... Leónidas y Antípatro para este epigrama, que pertenece a una serie de ellos sobre el famoso misántropo Timón, semilegendario ateniense de la época de Pericles. Es notable la ferocidad de la expresión.
LEÓNIDAS (?)
305 (VII 524)
-¿Es aquí donde Cáridas duerme? -En efecto, si al hijo
te refieres de Arimas el cireneo. -¿Cómo,
Cáridas, es lo de abajo? -Tiniebla. -¿El regreso?
-Mentira. -¿Plutón? -Es un mito. -Perdidos
estamos. -He aquí mi respuesta sincera; o, si un chiste
quieres, vale en el Hades mucho un toro peleo.
Probablemente se trata de un verdadero paisano de Calímaco. En los versos 1-2, el viandante habla con la losa; desde el 3, con el muerto (el final de dicho verso alude a la extendida creencia en la palingenesia o transmigración de las almas.) El 6 está oscuro; el sentido general parece ser que la única ventaja del Hades es que allí todo está barato, con alusión a una moneda poco valiosa de Pela en que estaba grabado un toro. Todo ello refleja el escepticismo del poeta sobre las leyendas de ultratumba.
CALÍMACO
465 (VII 285)
Ni la tierra ni el peso sutil de una piedra, mas todo
este mar que contemplas es tumba de Erasipo;
pues murió con su nave y tan sólo podrán las gaviotas
indicar el lugar que pudre sus huesos.
GLAUCO
* * * * *
ANTOLOGÍA PALATINA I. (Epigramas helenísticos). Traducción e introducciones de Manuel Fernández-Galiano. Traducción revisada por Luis Alberto de Cuenca. Editorial Gredos, Madrid, 1978.
Bajo esta etiqueta -Florilegio (Antología mínima de autores varios)- pretendo acoger una selección de textos breves (verso y prosa) que, al margen de cualquier juicio crítico, me han interesado como lector. Los textos en prosa responden a "géneros" que hacen de la brevedad virtud: aforismos, poemas en prosa, fragmentos, microcuentos, etc. De los textos poéticos en otras lenguas ofrezco el original. Menciono, asimismo, la edición utilizada en cada caso. (Téngase por excepción cualquier olvido de estas pautas.) |