Wozu Dichter in dürftigert Zeit?, escribió Hölderlin; ¿para qué los poetas en tiempos de miseria?, reza la traducción proverbial.
Con este sobrecogedor poema, y más allá de las fotografías que lo acompañan, León Felipe propone una respuesta al poeta alemán. Auschwitz ha sido, es y será un nombre clavado en el corazón de las conciencias; un nombre que define por antonomasia el asesinato industrializado.
Escuchar este poema, que no conocía, en la voz de Berta Singerman es una experiencia singular. Tras escucharlo, y algo aturdido, alcanzo a pensar: el mal es inimaginable, el mal que se imagina es entelequia; el único mal, el mal en acto, se burla de la imaginación y no acepta sino a la realidad por testigo. Imaginado, el horror es horror de salón, horror en busca de dóciles estremecimientos.
1 comentario:
La palabra se quiebra en silencio y el silencio se estrella en los ojos asombrados de los asesinados. Sólo nuestra memoria los regresa, ahora y siempre.
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